jueves, 28 de agosto de 2014

Se queda corta la vida. De Palma.

La incomprensión del suicidio.

El suicidio de una persona joven siempre golpea en nuestra mente de manera brutal, sobre todo si esa persona para nada parecía en algún momento estar deprimido.

Algunas personas incluso tachan de cobardes a aquellas otras que deciden quitarse la vida y dicen que no entienden sus motivos. Yo los entiendo perfectamente....sobre todo aquellos momentos en los que necesitas un hombre para llorar y nadie parece estar interesado en escucharte ¿cuántas veces os ha pasado que le comentáis a un amigo que estáis mal y os ha cortado para contar cualquier tontería? Esto que parece tan inocente y sin importancia para aquel que vive un infierno en su mente es un detonante enorme, para más inri suele ocurrir con gente que siempre te ha utilizado de paño de lágrimas.

Las fuerzas se agotan y no nos damos cuenta de que todos dependemos de todos, parece que estamos más ocupados en encontrar nuestro propio bienestar egoísta, sin darnos cuenta de que a veces se convierte puro egocenctrismo. ¿Cuaándo es la última vez que le preguntaste a un amigo cómo estás mirándolo a los ojos? ¿en qué momento acordaste que para estar bien tenías que ignorar a aquel que siempre se ha preocupado por tí?

He de reconocer que a mí me ocurrió eso un tiempo, hubo un tiempo en el que fui egoísta e incluso injusto con la gente que alcanzaba sus metas y me daba consejos, pensaba ¿ellos qué saben de mi vida? lo gracioso es que luego me quejaba de que nadie se preocupaba por mí...vamos un lío enorme que se resume en mi egoísmo y mi falso orgullo.

Desde hace un tiempo procuro reconocer que no sé todo, poner el hombro al que lo necesita y pedir ayuda cuando la necesita, aunque desgraciadamente esto último anda escaso, parece que la gente que tenía por amigos andan muy ocupados...

De todos modos, no tengo intención de suicidarme, porque tengo otras muchas cosas por las que vale la pena seguir peleando, he pasado de ronda y tengo que intentar clasificarme para la final....aunque como decía al principio entiendo la desesperación y la soledad del que se cansa de luchar, a ellos le dedico mi esfuerzo y les deseo que estén donde estén encuentren la paz.

lunes, 18 de agosto de 2014

Amore mistico. Pino Donaggio

Gracias.

Queda poco para terminar un verano que no ha salido para nada como esperaba. Recuerdo, planear que iba a dedicarme un verano a prepararme el C1 de Cambridge y a  mí mismo (en la medida de que mis padres ya mayores me dejaran hacerlo); sobre todo quería un verano tranquilo en el que aclarar mis ideas, valorar mis opciones y buscarme la vida tras el sueño terminado de la universidad y la pesadilla del trabajo perdido.

En una de esas llamadas que Dios, la vida o el destino (a gusto del consumidor) te hace, me encontré un día en las puertas de una asociación que trabajaba con niños y niñas de etnia gitana y me surgió la posibilidad de trabajar en un programa de apoyo y éxito escolar con ellos y ellas.

Mucha gente piensa que los gitanos son ladrones y mentirosos, odiados y temidos a lo largo de la historia, encasillados en su papel de aprovechados y perezosos....Una pena que solo veamos esa cuarta parte de la realidad, ya que en mi caso me he encontrado con gente buena y noble, chavales que me han hecho sentirme como en mi casa, brindándome su cercanía y esfuerzo, porque si han hecho algo a lo largo de todo el verano ha sido esfrozarse, y no simplmente con sus estudios, sino en ser buenas personas.

Ya está bien de prejuicios raciales, de pensar que unos somos mejores que otros simplemente por haber nacido blancos, amarillos, negros....me agotan los nuevos esnob que presumen de lo que tienen, olvidando sus raíces...

¿Por qué no puede haber médicos gitanos o gitanas? ¿por qué no maestros y maestras? ¿Dónde está escrito?

Desde aquí sólo puedo darles las gracias a todos y todas por haber compartido conmigo un gran verano, en el que me hemos aprendido, reído y llorado pero sobre todo, espero que sigan peleando por sus sueños, que recuerden que la mejor manera de cerrar bocas no es gritar, ni pelear, es seguir esforzándose por ser lo que sus familias, amigos y "profes" esperamos de ellos y ellas.

Chicos y chicas sois grandes, no lo olvidéis nunca.

lunes, 11 de agosto de 2014

My inmortal. Evanescence.

No me importaría.

En la hipotética mitad del camino creo que no me importaría morir en un acto de valentía o cobardía según se mire. Por un lado, me aterra pensar que no voy a poder alcanzar en esta vida una plenitud laboral por haber encontrado tarde mi verdadera vocación y por otro lado considero que he sido muy afortunado de poder vivir la vida que he vivido. En este extraño pulso se encuentra mi vida, ya que de sobra sé que para convertirme en un buen docente, necesariamente he tenido que experimentar situaciones que en un desarrollo vital más lineal no hubiera vivido.

Mucha gente se empeña hoy en día en que los docentes tienen que estar muy preparados, tienen que tener muchos títulos y "papelitos" en los que ponga que están cualificados más que de sobra para enseñar a leer, escribir, multiplicar, dividir, Inglés etc...pero olvidamos una cosa, ¿cómo puede alguien saber lo que está sintiendo un niño o adolescente ante la pérdida de un ser querido o un suspenso injusto o justo si no lo ha experimentado antes?

Me encanta ver a gente dar charlas sobre drogadicción con historias sacadas de la wikipedia...¿cómo hablar del dolor de ver el resultado nefasto de la droga en tus amigos de la infancia? o gente que habla de fracaso escolar con expedientes brillantes...No digo que no haya gente valida para realizar este trabajo sin la necesidad de haber experimentado ciertas cosas, simplemente defiendo a la Escuela de la Vida, aquella por la que todos hemos pasado y nos ha enseñado mucho más que un libro de texto.

Supongo que por mi parte ya he tenido suficiente, he llorado y he reído con el amor, he sido amado y he amado, he aprendido y me he equivocado, ahora simplemente estoy preparado para decir adiós, esperando que en la próxima vida no se me olvide todo lo que he aprendido en ésta y pueda llegar a ser un buen docente y aceptar la muerte de mis seres queridos (un aprendizaje que aún me falta por alcanzar).

viernes, 8 de agosto de 2014

La calma. M-clan

Avanzamos hacia el final.

Es paradójico observar nuestra avance hacia el final. Es imposible detener el tiempo y pararse a disfrutar con cosas y personas que son efímeras como todo en la vida.

Me da vértigo pensar el modo en el que he vivido prácticamente la mitad de mi vida sino más, en una oscuridad perenne, la cual solo en momentos determinados se ha visto desbordada por una brillante luz. Afortunadamente desde hace algunos años, intento que mis momentos de luz sean mayores que los de tinieblas.

Me da pena la gente que no consigue vivir fuera de la oscuridad aunque sea solo por un momento, pero más pena me da aún, aquella otra, que no sabe compartir y alumbrar un poquito a los demás, viviendo en un ritmo frenético sin encontrar la calma necesaria para compartir momentos de paz.

Hace falta, de vez en cuando un minuto de pausa para reflexionar...¿quién soy? ¿soy feliz?, necesitamos encontrar un lugar en el que nos sintamos serenos, ya que precisamente la serenidad es una de tantas cosas que se pierde con la edad y amenaza con no volver jamás.

Soy una persona solitaria, aunque he de reconocer que a este respecto soy ambivalente, ya que detesto y adoro la soledad a partes iguales. Las personas que comparten la vida conmigo saben que necesito de vez en cuando apartarme del mundanal ruido y tomar aire.

Afortunadamente en el avance hacia el final de mi vida voy encontrando muchas personas que me acompañan a estar solo.