¡Puf!

Es lunes y llueve.

Siguen sin pagarme lo que me deben algunos indeseables y yo sigo sin tener dinero en la cuenta para hacer frente a unos pagos que tengo que hacer, llevo así varios meses, sacando conejos de chisteras para hacer frente a la situación y la verdad los conejos ya se me van acabando.

Esta semana operan a mi padre y la verdad tengo miedo, odio tener miedo.

Siempre me he considerado una persona valiente, un superviviente como me han dicho pero la verdad creo que me hago mayor para esto.

No me apetece hablar con nadie sobre esto, sé que hay gente que se preocupa por mí, pero la verdad prefiero hacer las cosas a mi manera.

No sé por cuanto tiempo voy a poder aguantar, siento que he fallado a mucha gente, que quizás tenía que haber hecho las cosas de otra manera pero ahora ya es tarde, simplemente puedo continuar.

Supongo que mucha gente piensa que soy demasiado duro y exigente conmigo mismo, pero la verdad no puedo cambiar eso, aunque a veces me gustaría.

Me cansa ver como los políticos multimillonarios que nos dirigen hablan de la crisis y la destrucción de empleo, sin pararse a pensar en el daño psicológico que conlleva ver como tu trabajo peligra.

He tenido que aguantar gente que he conocido que estafan a la seguridad social con bajas interminables mientras siguen jugando al fútbol sala y presumen de ello, eso sí luego bien que graznan de los empresarios que se aprovechan de la crisis para ganar más.

He tenido que aguantar empresarios que se aprovechan de la crisis para crear más crisis despidiendo gente para ganar un euro más.

He tenido que aguantar gandules que no trabajan porque no les da la gana.

No sé cuanto aguantaré más.