Muchas veces soñamos con cambiar de vida, con conseguir objetivos que nos hagan sentir realizados o que nos permitan cierta estabilidad laboral o emocional pero tendemos a olvidar que las cosas no caen del cielo, por suerte o por desgracia en la vida todo cuesta trabajo y ese trabajo que tenemos que realizar es el precio de nuestros sueños.
Estoy bastante más de acuerdo con la afirmación que dice que con esfuerzo hay recompensa pero también debemos tener en cuenta que las injusticias están presentes en este mundo sino ¿Por qué hay gente que se muere de hambre mientras otros tiran la comida?
Pero los que somos afortunados y nos podemos permitir comer todos los días debemos recordar que las pequeñas injusticias a las que nos podamos enfrentar casi siempre no son permanentes, le podemos dar la vuelta a la situación ya que depende de nosotros.
Como mucha gente sabe, ahora mismo me encuentro en un proceso de cambio, estoy intentando reorientar mi vida, sentirme realizado, en busca de un trabajo para el que creo que valgo y para el que creo tengo que aportar muchas cosas, me está costando muchísimo trabajo y esfuerzo pero creo que pase lo que pase está valiendo la pena.
Mi precio a pagar es bastante alto, estoy sacrificando algunas cosas que antes pensaba que eran imprescindibles para mí pero soy consciente de ello y lo acepto.
Desde aquí quiero animaros a todos para que intentéis conseguir vuestros sueños y no tengáis miedo de tropezar, ya que tropezar es la única manera de no volver a caer.
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