Carta a un nuevo pequeño amigo.

Hola pequeño:

Ayer fui a visitarte y cada vez te veo más hecho un hombrecito, hay que ver colega con sólo un mes y como caen los biberones de leche, por no hablar de esos pedos que te tiras.

Seguramente jamás vayas a leer esto y no te imaginas la alegría que me ha dado conocerte, aunque no lo sepa mucha gente egoístamente te veo como parte de mi y es que lo que si vas a saber es que conozco a tu padre desde que eramos unos enanos y modestamente sólo te deseo que encuentres en tu vida un amigo que quiera a tu padre como lo quiero yo.

Anoche cuando os visité por circunstancias no me encontraba yo en un buen momento y la verdad ando un poco desconcertado inmerso en un montón de dudas y cansado así que anoche cuando no podía dormir me acordé de ti y me he atrevido a escribirte esta pequeña carta.

En esta carta me gustaría recordarte que seas feliz, que la vida es demasiado corta para llora todos los días ya que las lágrimas aunque no lo quieras van a aparecer y no las lágrimas que echas ahora pidiendo comida o ser cambiado que son lágrimas de vida sino aparecerán lágrimas de muerte y dolor pero para esas no te preocupes ya que vas a tener mucha gente que te quiere para abrazarte y consolarte.

La vida es maravillosa si la sabes vivir, pelea por tus sueños y no dejes que nadie te los arrebate, no hagas caso a los que te dicen que no puedes conseguir lo que te propongas, aprende a distinguir lo antes posible a tus amigos y a la gente que te quiere de verdad ya que ellos serán en los que te debas apoyar y a la gente que te haga daño mandalos lejos (o me los presentas a mi que ya verás) pero sobretodo quiere a tus padres, tíos y abuelos que ellos no te van a fallar y siempre velaran por ti.

Supongo que sólo el tiempo dirá si tu y yo llegamos a conocernos, porque si algo tiene la vida es eso que sólo el tiempo habla pero pase lo que pase que sepas que te quiero mucho pequeñajo y que espero que tengas una vida llena de alegría.

Un beso.

PD. Recuerda lo primero que te dije, con Molina de fiesta prohibido salir.