Por siempre yo.

Supongo que hoy es uno de esos días en los que quiero seguir siendo siempre yo.

He tardado 31 años en saber realmente lo que quiero y por lo que estoy dispuesto a pelear y va a ser una lucha dura.

Puede que la vida me lleve hacia otro lado distinto pero creo que ahora sé para donde quiero ir y al menos si no me lleva a esa orilla creo que quedaré cerca.

Entiendo que esto me va a suponer sacrificios a nivel personal y profesional pero ¿qué es la vida sin sacrificio? una vida sin sacrificio es como una rosa sin espinas, nunca terminas de disfrutar del olor de una rosa hasta que no te pinchas para que alguien te limpie la herida.

Tengo el gusto de conocerme, de tener gente que me quiere tal y como soy gente que me apoya de manera incondicional y que me demuestra día a día que son verdaderos amigos y amigas, gente que desde Ciudad Real, Alicante, Uruguay, Cracovia, Mallorca, Albacete no me dejan caer y me hacen seguir peleando por lo que creo, no pienso fallarles ni fallarme a mi mismo.

Supongo que ahora empieza la lucha definitiva por la supervivencia y por la felicidad, he aceptado mis prioridades y he encontrado mi equilibrio, me estoy dando cuenta de que lo único que necesito para ser feliz es a mi mismo y a la gente que me demuestra día a día que me quiere, la que no me quiere, me sobra.