jueves, 2 de abril de 2009

Se siguen empeñando.

Y la gente se sigue empeñando en buscar la felicidad en lugares equivocados.

Siguen insistiendo una y otra vez en fijarse en como viven los demás y que si ellos tuvieran lo que tienen los otros serian felices, que quien me pone la pierna encima para que no levante cabeza...

Mientras que algunos no paran de echarse las manos a la cabeza sufriendo por la vida de otros, algunos hemos descubierto que lo único que importa en la vida es vivir tu propia vida como creas oportuno y hacer lo que creas que tengas que hacer sin importarte nada más que la opinión de uno mismo.

El problema de mucha gente sigue siendo que justifican siempre su vida con la vida de otro y al igual que no hay dos personas iguales (ni siquiera dos hermanos gemelos tienen la misma forma de ser) tampoco hay dos vidas que sean iguales, cada vida es el resultado de unas circunstancias y no hay una vida mejor ni otra peor simplemente diferentes.

Mucha gente hoy en día dice no ser feliz, que el vecino de enfrente o la pareja amiga de turno son mucho más felices que ellos y esperan como por arte de magia que alguien venga a ponerles a sus pies la felicidad, por desgracia olvidan que en la vida como no salgas tu a buscar la alegría y las fuerzas de vivir nadie te las va a regalar.

Hay que ser personas fuertes y capaces de hacer las cosas por nosotros mismos sin necesidad de que nadie nos empuje, se me ocurre un ejemplo imaginad que en una vuelta ciclista cuando llega una etapa de montaña dura llega el corredor que va en mal estado y como ve que el otro corredor la sube sin mucho esfuerzo coge y se baja o le dice al público que le empuje para subirla... ¿quedaría un poco raro no? por el contrario la gente si lo puede animar y jalear al igual que los buenos amigos hacen con nosotros, pero al final cada uno debe de subir su montaña sin mirar como la sube el resto de personas.

2 comentarios:

giveme_theflavour dijo...

La gente intenta vivir siempre por encima de sus posibilidades, porque la vida no les da lo que quizá se merezcan según su pensamiento.
Bien es diferente quejarse por algo que luchar por ello para conseguirlo.

Es más fácil compararse con gente que tiene más, porque a la vida que cada uno tiene, se amolda en seguida... y es más triste y sencillo lamentarse por lo que falta que no dar gracias por tener lo esencial y necesario

Anónimo dijo...

me encanta tu blog,es tu diario personal pero con la diferencia que lo dejas abierto para que lo puede compartir la gente.Y sería muy bueno para todos nosotros expresar y decir todas esas emociones, sentimientos, pensamientos tantos buenos como malos que tenemos en un día cualquiera, y saber que al alguien le puedes ayudar o lo mas importante "te ayudas a tí mismo". "la amparo",je,je.....