Hace años me acuerdo de una serie que también marco mi vida aunque el otro día tristemente se me paso y no fue sin querer, vamos que me la deje aposta.
Esta serie era Autopista hacia el cielo con Michael Landon.
La serie trataba de un ángel que para recuperar su sitio en el cielo tenia que volver a la tierra y ayudar a todo aquel que se encontrara, iba andando por la autopista de un sitio para otro hasta que alguien lo recogía, resulta que el que primero lo recoge se vuelve su mejor amigo.
Esta serie es preciosa, os recomiendo que veáis algún capitulo y es un vivo reflejo de lo que es la vida.
La vida es una autopista por la que vas circulando, tu eliges la salida que quieres tomar, de vez en cuando te vas encontrando averías en el coche, pinchazos, atascos, conductores agresivos que te incomodan pero de vez en cuando también aparecen ángeles de la guarda que te ayudan a superar estos imprevistos.
Mi vida en los dos últimos años ha sido un imprevisto tras otro, pero por suerte siempre aparecen buenas personas, las antiguas que ya estaban y nuevas que valen mucho la pena.
Por otro lado siempre me ha gustado ser también un poco ángel de la guarda de la gente, echar una mano a todo el mundo desde la sombra pero en eso también había desconectado mucho ahora tras la muerte de uno de mis ángeles, recordar esta serie y ver "la vida de los otros" este fin de semana me he dado cuenta de que no puedo vivir sin echar una mano a los demás (defecto de fabrica).
Así que intentare seguir por esta autopista, recuperando mis antiguos valores, vida sana y sobretodo mente sana.... Estar atentos en vuestra vida porque no siempre los ángeles llevan alas...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
Lós ángeles existen, yo he visto alguno y no, no tienen alas pero tienen una luz dentro con la que te inundan y te llenan de paz. La próxima vez que quedemos te presto "Matar a un ruiseñor", tienes que verla.
Publicar un comentario