domingo, 14 de diciembre de 2008

La amiga de Ruud

Si algo uno tiene que tener claro es que la vida esta marcada, desde que nacemos todos sabemos que vamos a morir.

Esta es la única verdad absoluta que tiene la vida y el que crea que tiene mas pues peor para él, porque si algo te enseña la vida conforme te vas haciendo mayor es que toda la vida es una mentira si no sabes valorar lo que realmente tienes que valorar.

Estaba yo sentado comiendo tranquilamente en Baeza cuando pusieron imágenes del partido del Real Madrid y hablaban de una amiga especial que había venido desde Holanda para ver jugar a Ruud Van Nistelroy el jugador del Madrid, claro lo primero que piensas es una amiga especial de un futbolista.. lío de faldas seguro.. pues cual fue mi sorpresa cuando entrevistaron a esta mujer y con total normalidad vino a decir que para ella era especial ver jugar a Ruud pasar unos días con el y su mujer en su casa ya que le quedaban pocos meses de vida.

La verdad es que los macarrones que en ese momento me estaba comiendo a pesar de estarme muy buenos por un segundo se me quedaron en la garganta y no había manera de hacerlos entrar pero al rato comprendí que lo que decía esta mujer era la cosa más natural del mundo.

Seguramente ella padezca una mala enfermedad y tiene la certeza de que en pocos meses morirá pero ¿quién de nosotros va a vivir eternamente? ¿Quién puede contestar a las preguntas que todos alguna vez nos hacemos? ¿Quién soy? ¿De donde vengo? ¿Cuánto tiempo me queda aquí?

Esta claro que todos tenemos fecha de caducidad y entenderlo algunas veces cuesta, sobretodo afrontar la caducidad de los demás de la gente a la que queremos, creo que quizás eso asusta mas que la propia caducidad.

La muerte, le pese a quien le pese, es una parte de la vida y la única manera de afrontarla es viviendo, vaya estupidez parece esta última afirmación pero sinceramente creo que es así, todos en cualquier momento podemos morir pero al igual que la amiga de Ruud podemos elegir entre disfrutar de los amigos y familia o simplemente estar sentados en un sillón compadeciéndonos de nosotros mismos, de lo desgraciados que somos por lo que nos ha tocado vivir.

La vida es maravillosa y siempre vale la pena pelear por ella y vivirla con sus momentos buenos y sus momentos malos.

Hay que aferrarse a ella y disfrutarla sin pensar en que algún día se acabara o se acabara la de la gente que queremos.

Tenemos que ser capaces de afrontar nuestra vida porque nadie puede vivirla salvo nosotros mismos.

1 comentario:

Luisa dijo...

Me a gustado mucho, te da que pensar y mas en estos momentos, seguro que no caen en saco roto tus palabras.Gracias por adelantado.